Acerca de
Llego al mundo de la fotografía muy joven, a través de una caja de cartón de zapatos llena de fotos y diapositivas familiares que mis padres guardaban en cautela en el salón de casa. Mi madre me contaba que eran recuerdos muy valiosos, eran meros recuerdos atrapados en papel; los protagonistas de los pases de diapositivas familiares que mi padre organizaba aprovechando aburridas tardes de lluvia y frío. También eran imágenes escondidas en aquellos gruesos álbumes de fotos que olían a pegamento seco y papel viejo. Doy gracias a mis padres por el valor que le han sabido otorgar estas fotografías que reflejan toda nuestra vida, muchos momentos inolvidables y sobre todo para poder revivirlos una y otra vez. Me gusta trabajar en blanco y negro, tiene una calidad más onírica, más gráfica y atemporal. Se convierte en la opción preferida para capturar las luces y sombras, estructuras y emociones. El factor humano es una de las características imprescindibles en mi fotografía.